¿Cómo escribir una crónica periodística?

Recurso elaborado por María Fernanda Fitzgerald Galindo

En este recurso analizaremos los rasgos generales que definen a la crónica como género periodístico, cuáles son sus usos, sus características y las partes más básicas de su composición.

De acuerdo con La Real Academia de la lengua Española, la crónica es “una narración histórica en que se sigue el orden consecutivo de los acontecimientos”; asimismo, la define como un “artículo periodístico o información radiofónica o televisiva sobre temas de actualidad”. Sin embargo, es necesario analizar cuáles son las particularidades de este género, pues no conviene reducirlo a una definición. Para ello, a continuación conoceremos los puntos básicos que componen a la crónica y cuáles son las principales pautas que debería tener en cuenta al momento de elaborarla.

Tabla de contenido

• 1. La veracidad
  
  • 1.1 Las fuentes
• 2. La importancia
  
  • 2.1 Impacto sobre el debate público
  • 2.2 Usar un lenguaje claro
  • 2.3 Mostrar, no decir
  • 2.4 Entender la importancia del "yo"
  • 2.5 Abrir espacio a múltiples puntos de vista
  • 2.6 No abusar del "yo"
• 3. Bibliografía

1. La veracidad 

Es importante recordar que la crónica es un género periodístico, por eso mismo, la veracidad de los temas que se trabajan debe ser absoluta. Para conseguir establecer la autenticidad de una historia se depende, cien por ciento, de las fuentes.

1.1 Las fuentes  

¿Qué son las fuentes?: todo aquello que permita verificar los datos de una historia. Esto se puede conseguir a través de entrevistas, testimonios, estadísticas, cifras, voces de expertos, boletines de prensa, otras publicaciones, actas, discursos, el contexto político, social, histórico y económico y, en el caso de la crónica, se puede incluir la observación del periodista (ver punto 2.4). A través de todo esto conseguiremos establecer la verificación de nuestra historia y así daremos el carácter periodístico necesario.

Ejemplo: en su libro, El clan de los Doce Apóstoles, Olga Behar, periodista colombiana, reunió una extensa cantidad de documentos y testimonios que llevaron a que la justicia colombiana abriera un juicio para investigar a Santiago Uribe, en el que fue acusado de tener nexos con el paramilitarismo. En su libro, Behar escribió:

Esto, en medio de la inoperancia del Ejército y la Policía, y de la presencia de la guerrilla en las áreas en donde estaban asentadas las posesiones de los Uribe Vélez, lo habría hecho liderar una verdadera máquina de control armado territorial, que poco a poco se fue conociendo como Los Doce Apóstoles (pág. 58).

Para que un periodista pueda afirmar algo tan contundente debe tener una total seguridad respecto a la veracidad de su trabajo. De ahí la extrema importancia de sus fuentes.

 2. La importancia

La importancia de una historia contada en clave de crónica depende ampliamente de cómo sea narrada. No es necesario conseguir una primicia para lograr que la historia sea importante. En realidad, lo que más debe interesar, es cautivar a nuestro lector. Esto se consigue a través de varias claves:

2.1. Impacto sobre el debate público

Tener impacto sobre el debate público se puede lograr cuando se otorgan nuevos puntos de vista o nuevos elementos que rompen clichés sobre las historias ya contadas por todos.

2.2. Usar un lenguaje claro

Lo que busca el periodismo, en todas sus formas, es informar. Esto significa que, en un género como la crónica, usar un lenguaje llano, claro, contundente y transparente para el lector es de extrema importancia. El lenguaje de un periodista nunca debe confundir; por el contrario, es necesario aclarar.

2.3 Mostrar, no decir

La diferencia entre otros tipos de textos periodísticos y la crónica ocurre cuando entendemos que la crónica se vale de imágenes impactantes para comunicar. En la crónica no se cuentan los hechos a través de adjetivos; por el contrario, se cuentan a través de la descripción. En la crónica reina la premisa usada por todo buen narrador: mostrar, no decir.

2.4. Entender la importancia del “yo”

A diferencia de otros géneros, y en su necesidad de cautivar al lector, la crónica entiende que es necesario hablar desde la experiencia misma del periodista. Esto hace que la crónica sea un género que muchos han llamado literario. Incluso, grandes figuras como Martín Caparrós han señalado que la crónica bien podría ser una rama de la literatura. Sin embargo, no por esto se puede pensar que la crónica puede inventar, ya que ante todo debe primar lo periodístico (ver punto 1).

2.5. Abrir espacio a múltiples puntos de vista

Al desarrollar la importancia del “yo”, la crónica es capaz de reconocer su subjetividad. No necesita crear absolutos y, por eso mismo, muchas veces se puede entender como un género rebelde en contra de lo establecido. En la crónica, las historias que tienen relevancia son aquellas que se exploran desde el interés propio, al punto en que puedan ser exploradas con un lente que no ha sido utilizado antes. Aquí se marca una diferencia contundente con otros géneros periodísticos como la noticia, pues a pesar de que la crónica se mantiene sin inventar ningún hecho, es capaz de reconocer que no tiene la visión completa sobre los hechos. 

2.6 No abusar del “yo”

Sin embargo, es importante resaltar que, aunque el yo es esencial, la crónica no debe ser narrada necesariamente desde la primera persona. Es necesario que el narrador de la crónica reconozca que lo que debe importar es el contenido de lo que está narrando, no él mismo.

Ejemplo:

En la crónica “¡Salve, oh señores Robots!”, publicada en la revista Rolling Stone, el cronista Jonah Weiner devela detalles nunca antes contados sobre la banda Daft Punk. El autor de la crónica logró entrar hasta los estudios de la banda y los acompañó durante la grabación de su disco Random Access Memories. Para narrar a los lectores lo que vio durante el lanzamiento del primer sencillo del disco, Weiner escribió:        

A las 8:35, los Yeah Yeah Yeah están a punto de tomarse el escenario, el sol se ha puesto y, de improviso, los Jumbotrons estallan. El logotipo de Daft Punk emerge sobre la pantalla y ‘Get Lucky’ empieza a serpentear desde el interior de los parlantes. Los espectadores instantáneamente comienzan a bailar, alzan las cámaras de sus celulares, gritan cuando los robots aparecen en el video. En menos de dos minutos todo se acaba, y las pantallas se vuelven negras. El ánimo colectivo es el de una confusión estática: ¿Qué diablos fue eso? El equipo de Daft Punk se da espaldarazos para felicitarse. Pharrell choca las manos con Bangalter. En pocos días, el material por el público habrá conseguido más de un millón de visitas en YouTube, y ya amenaza con ensombrecer el resto del festival. Justo ahora, Bangalter rodea a De Homem-Christo con un brazo y murmulla unas palabras en francés. Luego se separan de la baranda y se van caminando juntos: dos rostros sonrientes entre la multitud.

Así, con su narrativa, Weiner no solo contó que Daft Punk hizo el lanzamiento de un nuevo sencillo (que aportó al debate público del momento por ser un lanzamiento muy esperado), sino que además transportó al lector al momento por medio de detalles expresados con un lenguaje claro y sencillo, que únicamente pudo alcanzar gracias a que él involucró su propia experiencia con el evento, pero reconoció que él no era el protagonista en todo esto: los músicos lo eran.

3. Bibliografía

• Behar, O. (2011). El clan de los doce apóstoles. Icono Editorial. 
• Caparrós, M. (2007). Por la crónica [ponencia]. IV Congreso Internacional de la Lengua española, Cartagena, Colombia. 
• Real Academia Española. (s.f.). Crónica. En Diccionario de la lengua española. http://dle.rae.es/srv/fetch?id=BLThYfx
• Weiner, J. (mayo 21, 2013). Daft Punk: All Hail Our Robot Overlords. RollingStone. http://www.rollingstone.com/music/news/daft-punk-all-hail-our-robot-overlords-20130521

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